lunes, 16 de mayo de 2011

Cristales... Cristales esmerilados... Transparencias... Destellos... Libélulas.

A veces desearía ser como un soplo de aire, para poder colarme por la cerradura de tu cajita de cristal, esa que escondes, esa cuya existencia tratas de ocultar, la que no muestras a nadie, y la que tal vez yo nunca consiga que me enseñes. Esa que siempre veo, a través de tus palabras, y que podría llegar a intuir en tus ojos, pero que desaparece cuando siento que voy a lograr tocarla.
Tengo la esperanza de que algún día abras el cerrojo, porque yo sola no puedo hacerlo, por mucho que quiera. ¿Lo harás?         ¿Qué guardas ahí? Recuerdos, miedos, sueños, pesadillas, tentaciones... No lo sé, tendrás que decírmelo tú...Pero no los ocultes todos... porque... un día abrirás los ojos y estarás dentro... Entonces ya no habrá nadie que pueda sacarte...porque te llevaras la llave contigo... Y creo que mis labios no saben susurrar las palabras secretas...

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